Se realizaron dos talleres y una charla merienda con la que se puso punto final a la parte teórica para pasar a la práctica.
En estos talleres se trabajaron las emociones a través de la gamificación y el juego y a través de la música. En el centro hubo música interpretada en directo y finalmente se pusieron sobre la mesa todos los miedos de los padres para vencerlos y regalar a nuestro alumnado nuevas opciones para llegar al centro.
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